Menu

Damasco: Tiro, Fenicia, El Imperio Asirio Y El Egipto De Siempre.


Autores


Resumen del Libro

Aquí te entregamos tres casos en que la región del Medio Oriente pereció aún en medio de su máximo esplendor, tal cual no han vuelto a ver y que nos muestra cómo los Imperios no son eternos y sucumben bajo el peso de sus injusticias y arrogancias. El Reino de Israel se dividió, y Asiria terminó arrasando con el norte, mientras Egipto sucumbía junto a Tiro y Fenicia—al igual que Israel en el restante sur—ante la fortaleza indiscutible de Nabucodonosor, rey de Babilonia. Cuando el rey Salomón muere—en el 933 a.C—su hijo Roboam no siguió el consejo de los ancianos y en lugar de suavizar el yugo de su padre—quien se excedió con suma autoridad en sus últimos años—ordenó reunir al pueblo, y con gran soberbia les auguró: El menor de los dedos míos es más grueso que los lomos de mi padre…mi padre os cargó de pesado yugo…os hirió con azotes, mas yo os heriré con escorpiones (1 Ry 12:7-14). Tal muestra de insolencia hizo supurar a un pueblo en discordias. A través de la historia estas tres naciones del Medio Oriente que hoy está a punto de arder: Egipto, Israel y Asiria, jugaron un papel importante en relación a los acontecimientos que estremecieron a la humanidad, si bien en la época moderna—por llamarla así—pasaron a ser, como también estaba profetizado: insignificantes, sin embargo, las cosas están al cambiar en la próxima página histórica de la civilización humana. El profeta Isaías nos está anunciando una caída inmediata y un levantamiento futuro, es decir, aquí hay dos profecías con un intervalo entre sí de aproximadamente 2600 años. Finalmente Tiro, cuando gozaba de prosperidad, esplendor, dominio del comercio mundial y la política, no fue bastante al parecer y repentinamente terminó en la nada, como una peña lisa. No existió más, desapareció en la historia y con ella su pueblo. Los políticos de las naciones cometen graves errores al ignorar estas profecías, imbuidos en sus egos narcisistas …


Opciones de descarga:


Comenta el libro

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *