Descargar Libro: Viajes De Fray Gerundio Por Francia, B Lgica, Holanda Y Orillas Del Rhin

Resumen del Libro

Este libro hist rico puede tener errores numerosos, falta texto, im genes, o un ndice. Los compradores pueden descargar una copia gratuita escaneadas del libro original (sin errores) de la editorial. 1861. No se muestra. Extracto: … estai eternamente mi ntras no vea los francos en la tabla del mostrador. Y esta costumbre de no entregar los billetes sin que vaya por delante la paga, es extensiva los despachos de diligencias, de caminos de hierro, y cualesquiera otros en que los billetes fueren menester. No hay que temer que en los despachos de teatros falten nunca billetes de entradas de cualquier localidad que se pidan: jamas dicen: no hay billetes, si el teatro est lleno, si no es posible ya entrar, tenga paciencia el curioso aficionado si perdi su dinero y se ve privado de ver la funcion. No hay como en Espa a billetes numerados correspondientes determinado asiento y con derecho exclusivo individual inamisible a l: alli un billete de primeras faculta para ocupar un asiento de stalles lunetas, uno de palcos principales (premieres loges) de primeras galer as (porque la estructura de los teatros tampoco es igual la de los de Espa a), y uno de segundas da opciou cualquiera de los palcos segundos, de las galer as de segundo rden y otras localidades, como los de parterre (patio) la da cualquiera de los asientos de su clase, a libre y absoluta eleccion del comprador, de manera que all la ventaja y la comodidad est de parte de los que se adelantan, de los mas atrevidos, de los mas forzudos empujantes empellonistas. El que se descuida un tantito, aunque vaya provisto de su billete de primeras, tiene que quedarse en pi derecho, si ni aun as halla cabida, salirse mustiamente buscar otra diversion. Ni aun la eleccion de un asiento da un derecho de posesion permanente y segur…