Menu

Jaime Trilla Libros

La Aborrecida Escuela

Si he de ser sincero, toda mi época escolar no fue sino un aburrimiento constante y agotador que aumentaba de año en año debido a mi impaciencia por librarme de aquel fastidio rutinario. No recuerdo haberme sentido alegre y feliz en ningún momento de mis años escolares – monótonos, despiadados e insípidos- que nos amargaron