Adrian Garcia Perez Y Laura Cuenca Libros
Sed Y Sangre
Cuando empezaba a creer que podría escapar de la pesadilla, recibió la carta. No había sido escrita por el diablo, aunque él la había impulsado, sino por Asmara Lux, que en un desesperado e impulsivo intento por demostrarle a su prima que todas aquellas historias sobre vampiros no eran más que patrañas, había entrado por